Entre cambios de pañal y sonadas de moco elaboro en mi coco un nuevo cuento que contar, un personaje que dibujar.
Mientras llevo a Unai al cole, recojo la casa, doy el pecho a Ismael y un largo etc.… no paro de imaginar.
Doy vueltas por la casa esperando que mi amiga inspiración venga a visitarme y cuando está a punto de llegar un llanto desconsolado me recuerda que tengo que dar la teta a Ismael.
Voy a dejar la puerta abierta, quizás mi amiga quiera venir a verme mañana...!!!!????!!!!
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